Una paciente de Respiro, Irene Nevado, nos cuenta sus proyectos vitales y cómo es vivir en el día a día con un trasplante. Ella es tiene fibrosis quística, se ha realizado un trasplante bipulmonar dos veces, además es enfermera.
A raíz del segundo trasplante, en el que tuvo un periodo de dos años en listas de espera, creó su proyecto personal que se llama «La vida Espera» donde ejerce como coach de salud enfocada al paciente en espera y después del trasplante. «El Coaching es dar apoyo, orientación, y ayudar a resolver todas las dudas y problemas que puedan surgir en el proceso del trasplante dando herramientas a esa persona que está llena de recursos para encontrar una solución frente a una situación en concreta para suscitar la transformación» nos cuenta Irene.
Ella como paciente experto ayuda a afrontar las preguntas más frecuentes con conocimiento porque siempre este tipo de paciente va con miedo a la cirugía y es normal pero concienciarles previamente, aporta tranquilidad y van más preparado: ¿Qué sentiré en el proceso de la cirugía del trasplante? ¿Qué me espera después? ¿Cuánto tiempo pasaré en cuidados intensivos? ¿Qué tubos o ventilación necesitare? y muchas otras preguntas.
Puedes ver su trabajo en las redes sociales como instagram @lavida.espera Además dispone de un convenio con la Asociación Madrileña de Trasplantados de Pulmón que financia sesiones de coach a los pacientes que se encuentran en el proceso, infórmate si es tu caso.
Los pacientes con fibrosis quística necesitan la fisioterapia respiratoria durante toda su vida para eliminar las secreciones más densas y viscosas que se generan en el pulmón para evitar sobre infecciones y mejorar la calidad de vida disminuyendo la tos y aumentando la tolerancia al ejercicio.
Actualmente una de las técnicas más utilizada en el paciente hipersecretor es el Drenaje Autógeno. «Con poco esfuerzo para el paciente, se consigue movilizar el moco que hay a nivel bronquial trabajando con distintos flujos inspiratorios y espiratorios» nos cuenta Irene. Es una técnica que requiere un aprendizaje por parte del paciente, pero que demuestra resultados muy positivos en la desobstrucción bronquial.
«La fisioterapia respiratoria te cambia el humor» ella nos dice, que lleva realizando una terapia continua desde el pasado verano.
Sin ninguna duda, la actividad física.
El trabajo de fuerza muscular, ejercicio aeróbico como salir a caminar o hacer bicicleta, además del entrenamiento de la musculatura respiratoria deben ser el pilar esencial para cualquier paciente que tenga una patología respiratoria crónica.
Buscar un deporte que te guste y un profesional que te guíe durante la rutina de ejercicio te ayudará a encontrar motivación para marcar un hábito con el objetivo de mantener y ganar masa muscular además de ayudar a mover las secreciones y mejorar el estado de ánimo y cuidar la salud mental.
